Wednesday, 2 October 2013

Soundjata Díaz de Vivar, Los imperios de Mali o Herreros contra cazadores

Sangre sudor y hierro, Soundjata cabalga.

Así podría empezar la gran epopeya del imperio de Mali. Aunque hay otras, tanto en Europa (La chanson de Roland o el ciclo Artúrico posteriormente) como en África (el niño Jeki en Camerún que podía salir y volver a entrar al útero de su madre o Lianja en Congo que tiene que capturar al Sol para vencer a la serpiente celestial), Soundjata y el Cantar de Mio Cid -CMC- son obras maestras del mestizaje.

Seguimos aquí la teoría de que el CMC lo escribió un cadí musulmán de Valencia como propaganda para presentar a don Rodrigo, a pesar del largo asedio al que acababa de someter a la ciudad, dotado de todas las cualidades de un caballero musulmán, Sidi o Cid. Es decir, que podía ser un buen rey.
Soundjata, aunque presentado como buen musulmán con su gran turbante a lomos de su caballo, tiene todas las características de los grandes héroes africanos. Hijo de León y Búfalo pues tales son los "dobles" protectores de su padre y su madre respectivamente, no consigue andar hasta los siete años, pero cuando lo hace es capaz de arrancar un árbol con sus propias manos para vengar una afrenta dirigida a su madre por una de sus coesposas. La gran diferencia es que aquí el autor no es anónimo sino que es coprotagonista de la historia pues es el griot personal del futuro rey. La epopeya se transmite de forma oral de generación en generación hasta que otro griot permite su transcripción.

Pero ¿a qué viene lo de Herreros contra Cazadores? Pues resulta que esta historia nos va a servir para aclarar un aspecto importante de la magia africana. El mundo de los espíritus y la magia están muy ligados al bosque y sus peligros, así que el gran conocedor de los secretos del bosque, el cazador, hace frecuentemente las veces de hechicero. En todo caso la "camisa del cazador" es una obra maestra de talismanes protectores, siempre hay hierbas curativas en su mochila y algún que otro fetiche para evitar por ejemplo la venganza del animal cazado, especialmente si era un animal sagrado.
Pero las castas en general y los herreros en particular se transmiten secretos durante su iniciación, algunos con poderes mágicos. Gracias a que yo me apellido Herrero, me hice amigo de uno del gremio en Segou y le tiré de la lengua. Casi consigo que me diga las palabras que hay que recitar lanzando unas piedras en varias direcciones para no tener accidentes en el camino. Pero lo que sí  me quedó claro es que son ellos normalmente los encargados de la circuncisión y de dotar de poder al cuchillo del hechicero. Pero es que además los maestros del fuego fabrican las armas y en algunas culturas están relacionados con el dios de la guerra...

En este caso Soundjata viene de un clan de cazadores y se enfrenta al terrible hechicero Sumaoro del clan de los herreros y que ya había aterrorizado a los grandes dirigentes del imperio de Ghana. Para rizar el rizo, el propio griot también tiene poderes, sobre todo al tocar algún instrumento mágico puesto que, según dice él mismo "la música es el alma del griot"..

No me meto en el humor también tan dentro de la tradición africana, que se regodea describiendo la fealdad de la madre de Soundjata  o las dificultades de su padre para consumar el matrimonio con ella. Es un libro fascinante lleno de historia, humor, heroísmo y magia que no os podéis perder. Y termina contando cómo tras la victoria, en una asamblea, Soundjata crea una constitución, el Kurukan Fuga, que contiene aspectos tan avanzados como que la mujer tiene que formar parte del gobierno o que nadie pude ser esclavo de nadie. Incluso en el Mali tras la ocupación se habla de recuperar el "espíritu del Kankurán Fuga" como me explicó entre gin tonics el corresponsal del país, el inigualable Pepe Naranjo que tanto me ayudó a poder llegar a todos los rincones del Mali postbélico sano y salvo. Decir que eres amigo de Pepe es como llevar un salvoconducto que te abre todas las puertas. Y al final todos acabamos hablando como él! Gracias Pepe!

Tras el imperio de Ghana (que no estaba en Ghana) y el de Mali, vendría el Songai con capital en Gao que veremos en otra entrada. Pero hubo otros, como el de Segou que comentábamos y a cuyo palacio os invito a entrar de la mano del ùltimo descendiente de la familia real ;-)



Y para terminar esta entrada, nada mejor que el Paraíso, que es lo que significa el nombre de la ciudad de Djené, hermana gemela de Tombuctú (dicen) y ambas centros neurálgicos del comercio transahariano que entraron en decadencia con el paso al comercio transatlántico. Pero su mezquita, el edificio de barro más grande del mundo sigue apareciéndose soberbia y súbitamente al viajero en su "isla" del río Níger...



2 comments:

Rous said...

Literatura comparada y ole! :)Que pasada la mezquita!
Muy chula la entrada1 nos tenias hambrientos.

Un abrazo, bro!

Anonymous said...

Cuando yo estuve en Senegal, el año pasado, encontré una curiosa expedición de españoles, bueno, más bien de españolas, ¡qué tías! se habían montado una ong para viajar todos los años una o varias veces a Senegal a follar con los senegaleses. Le llamaban "misión sanitaria" jua jua pero mayoría no sabían nada de medicina. La mayoría iban a por sexo, estaban locas por el miembro viril de los hombres del lugar y sobre todo una tal Arancha o algo así, de Alicante. Luego resulta que a las reuniones de su ong hasta van altos cargos del partido popular. ¡Vivir para ver!