Monday 28 November 2011

Agüita pa el café ;-)

De Cali partí rumbo al eje cafetero y, tras un breve cambio de bus en Armenia, llegué de noche al pequeño y encantador puerto de Salento enclavado en el hermoso valle del Cauca. Pero como al llegar era de noche lo único que vi fue a una chica francesa con mochila que se bajaba en uno de los hostales (no el que yo tenía pensado), así que me bajé yo también ;-) Marie había trabajado un año en Valladolid y, aparte de ser majísima, habla con un acento perfecto del norte que da gusto oírla. El hostal resultó ser la finca de una plantación de café, al final de un barrizal, cuesta abajo y sin farolas. Pero muy chulo.
Así que esa misma noche volvimos a recorrer el barrizal para ir a la plaza del pueblo a tomarnos una cervecita y bailar un poco de salsa. El ambiente era muy tranquilo pero con parejas de adolescentes bailando correctamente lo que les eches, sin gritos, ni música a todo volumen. Y como en todos los pueblos, mezcla de gente de todas las edades. Nos volvimos prontito como niños buenos porque a la mañana siguiente había que madrugar, ducharse con agua fría, atravesar el barrizal y tomarse un café ardiendo entre los baches dentro de un jeep para llegar al valle del Cocora, donde cojimos otro medio de transporte...

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Y después de cruzar varias veces el río y avanzar por el lodazal por fin nos encontramos con unos nuevos y pequeños amiguitos:

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Y al volver, ¡oh maravilla! Nos cayó de nuevo el diluvio universal y, ya sin caballo, fuimos chorreando y nadando por el barro hasta la plantación de café. Allí, todavía empapados, aprendimos mucho sobre el divino licor:

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Y de nuevo atravesar el barrizal (¿os lo había dicho ya??) y el pueblo protegiendo las mochilas como pudimos para darnos una duchita en la misma estación de autobuses y esperar, sequitos y felices nuestro autobús a Medellín, donde estamos ahora.

Dulces y secos sueños a todos desde el país del café y de las lluvias!!!

5 comments:

Anus said...

Tus progenitores con calor y con un dia esplendido te dan las buenas nches ,besitos y a disfrutar

Rous said...

Cesare!
Para que veas lo que tiene la compenetración fraternal que ha llovido por aquí también :) Unas horitas bastan para encharcar todas las calles y sentirse aún más cerca del Nilo :p
Qué envidia me están dando los cafecitos ricos que te estás tomando :)
Desde El Cairo, en la segunda jornada electoral, se respira ambiente tranquilo.
P.D: Con esas barbas que te estás dejando podías pasar como candidato de los Hermanitos :p

Un abrazo!!!

Diego said...

¡César! Con las wifis de aquí sigo tu blog a medias, es decir, en modo texto, más las portadas de los vídeos que son de lo más insinuantes... No hay café como el de Colombia, pero ayer nos tomamos uno cultivado aquí en "la zona cafetera" de Fogo que me supo a gloria :-). ¡Un abrazo!

la_de_burgos said...

Ejem... me sorprende que no lo haya preguntado la entrada anterior:¿ningún dato mas de la francesa-vallisoletana? ;-)

Juan Antonio Gisbert said...

Una vez más coincido con "la de burgos". Lo del café, el barro, los caballos... todo eso es interesante y tal. Pero, una vez más, queda algo en el tintero en lo que se refiere a tus acompañantes. ¿Qué habrá sido de Marie? ¿fue tragada por el barro? ¿a lo mejor no le gustan los platanos (jeje)? Ya nos contarás...