Sunday, 25 October 2009

One wall. Two jails.

Un muro, dos prisiones.

El miedo construye muros, la esperanza puentes.

Asi, un monton de frases y de dibujos van erosionando poco a poco el hormigon y el odio del muro de la verguenza.

Hoy hemos ido por tercera vez a la Mezquita de la Roca. El viernes estaba cerrada por ser dia de descanso para los musulmanes, el sabado tambien descansaban (y ademas es el de los judios) y el domingo...

Nos esperaba el ejercito. Ya sabeis, esos chavales a los que aqui les dan un chaleco forrado de armas y a pasear por Jerusalen. Era lo de tantas otras veces. Un grupo de judios habia pasado a la Mezquita de la Roca, teoricamente controlada por los musulmanes (pero todos los pasos los controla el ejercito) indignando a estos que han intentado echarles, momento en el que (como estaba previsto) ha entrado el ejercito con gases lacrimogenos, con antidisturbios y con gran despliegue a echar de la Mezquita... a los musulmanes!!!

En ese momento llegabamos nosotros. No se podia pasar y los del arsenal nos decian que fueramos al muro de los lamentos. Los palestinos que esperaban fuera indignados, pero ya con rutina, otra semana mas, nos decian que vieramos lo que hacian los judios con ellos. En esto pasa un judio con su kipa, y aunque me temia lo peor solo ha recibido un silencio recriminatorio. Seguina oyendose disparos de gas lacrimogeno. Y llegando mas militares.

Los musulmanes gritaban algo asi como podeis quitarnos la vida, pero el domo de la roca no. Despues paso otro judio con los rizos y la vestidura tipica. Esta vez recibio una patada de un nigno de unos trece agnos. Se volvio hacia el con el orguyo herido. Detras, un pugnado de palestinos y detras el ejercio de israel. Tras aguantar al nigno la mirada unos segundos, se fue. Despues le vimos describiendole a un policia como era aquel chaval.

Mientras unos estudiantes nos explicaban lo que pasaba, un indignado nos grita "Palestina for the palestinian, go out!". El resto sigue hablando con nosotros. La cosa se va calmando. Comprobamos que el resto de las puertas estan igual. Subimos al monte de los olivos, donde lloro Jesus, para ver que estaba pasando dentro de la explanada. Pero solo vemos televisiones y un helicoptero del ejercito sobrevolando el Domo, aparentemente "evacuado".

Volvemos a entrar a la ciudad vieja, y en el trocito de calle que precede a la Via dolorosa, donde Jesus empezo su viacrucis, los musulmanes iniciaban el suyo. Tras la llamada del almuhecin, al no poder entrar en la Mezquita, rezaban frente a sus muros, convertidos ahora por el Ejercito en su propio Muro de los Lamentos.

A pocos pasos, como si no fuera con ellos, turistas cristianos seguian devotamente el que probablemente no fuera el camino en que Jesus llevo su cruz. Solo una pregunta (a un parroco por supuesto) si todo esto era real o es que estan rodando alguna pelicula.

Frente a mi el muro de la mezquita, el del odio, el de la ley del mas fuerte, el de la indiferencia se fundian con el judio de los lamentos. Victimas del pasado y victimas del presente. Ese muro se llenaba de hormigon y me parecia el mismo que se convierte en el nuevo portal de Belen, que pervierte el paisaje de Ramallah (o en la verja que divide en dos su mezquita y la llena de soldados).

Se mezca delante de mi con muros del pasado y pienso con esperanza que esos ya cayeron. Y me entran ganas de decir algo a los turistas cristianos. O de escribir en la pared con el dedo: one wall, two jails. O: el miedo construye muros, la esperanza puentes...

Pero estoy cansado y furioso. Salgo pisando el suelo de piedra blanca, por la puerta blanca de Damasco.

En el cielo al menos el Sol escucha las plegarias de los muros de la mezquita de Jerusalen.

6 comments:

Ana Iriarte said...

cesar!! la envidia me corroe de mala manera!! me encanta el viaje que estas haciendo y ya me informaras porque me encantaria hacerlo. Sigue disfrutando lo que te queda, un beso!!

anus said...

Hola cariño,qué pasada, la verdad es que ayer lo vimos en la noticias, pero pensé: va mi hermano estuvo allí hace un par de días pero seguro que ya no, habrá cambiado de destino, pero me equivocaba...es impresionante lo que cuentas y se ponen lo pelos de punta, pero escuchame bien, ESCRIBE EN TU BLOGG TODO LO QUE QUIERAS,LO QUE SEINTAS, DESAHOGATE, pero allí ten mucho cuidado con lo que dices, ya me entiendes.
Bueno te podrás imaginar cómo está mamá,la acabo de decir que habías escrito y que estabas bien, pero vamos que si puedes...seguro que le gusta oir tú voz.
Cambiando de tema: Marcos ha venido encantado de la acampada ya te contará el, pero hoy se ha levantado con un poco de fiebre, pero vamos un chute de apiretal y al cole, supongo que igual cogió algo de frío o algún virus, imagino que lo normal.

Hoy es el cumple de Dieguito, sólo es para que sepas en que día vives, je,je.

Un besazo.

Anus

Cris said...

¿Llevas encima al menos el amuleto para los perros?
Cuidate Cesi

José said...

Qué pasa César!
pues parece muy interesante toda tu experiencia, ahí en el meollo del problema, en la ciudad santa de las tres religiones monoteistas, el lugar perfecto para que los judios, musulmanes y cristianos se ignoren y desprecien mutuamente...
Me parece además que tu experiencia es bastante más heavy que las manifetaciones prokurdos a las que los habitantes de Estambul estamos acostumbrados, manifestaciones con un enorme despliegue policial para un puñado de kurdos problemáticos...
Si no supiera que estás en España te diría también que tuvieras cuidado, sobre todo después de saber que eres considerado un peligro número 5 para las autoridades israelíes...
Bueno, igual te lo digo, cuídate por Madrid, que es bien peligrosa con tantas obras y un abrazo desde Estambul.
Nos leemos (y tal vez nos vemos también) Un saludo!

Jaime Olmedo said...

cuidate César. Un abrazo muy grande!

Gildo Kaldorana said...

Hola,
Veo que has viajado a mogollón de sitios, pero te falta uno, espectacular, de lo mejorcito y se llama Indonesia.
Nunca es tarde, tu te lo pierdes.
Salud y suerte.